domingo, febrero 25, 2007

De lo picante a lo sabroso


Ya más instalada en la región y en la opinión pública del colador veraniego se destacan comentarios más picantes que vienen de la pluma de Alfredo Jocelyn Holt sobre el currículo “inconcluso” de José Joaquín Brunner, la evaluación del nepotismo y la pitutocracia en el aparato público a través de la radiografía de Dávalos Bachelet y Lagos Weber por Patricio Navia, y por cierto el análisis político sobre la situación de la Concertación de Alfredo Joignant y del gobierno de la actual mandataria de Carlos Peña. De todos: ¡pago para ver y comer! como dicen por estas tierras.
Sea desde el análisis microfísico como desde el análisis más universalista las cuatro cabezas pensantes que de un modo general son referencias de opinión en el país y en los medios santiaguinos, llegan al punto nodal, sobre la “compleja y casi ciega” situación que vive la Concertación de partidos por la democracia de no enfrentar de una buena vez el agotamiento y la insistencia en ciertas maneras, costumbres y modos adosados a la cultura política y a la gestión pública que no se condice con la ética de la responsabilidad ciudadana de cara a la transparencia, la equidad, e incluso a lo que podría llegar a ser una segunda etapa necesaria de modernización y democratización.
Sea en asuntos de agenda pública ya fijados desde el 2.006, sea en los contingentes y coyunturales, lo que se refleja en todas las conversaciones de una manera nítida es que el continuismo de la concertación en el gobierno en las actuales condiciones refleja un cansancio, un agotamiento, un despilfarro, y cierto atisbo de incredulidad o desafecto por parte de la ciudadanía.
Es cierto que la Alianza no retoma la credibilidad ni la adhesión, sin embargo, de aquí a dos años más, de continuar así, a punta de bostezos la gobernabilidad local, regional y nacional, ya en las municipales capaz que consigan atraer una cierta clientela electoral desencantada, que no observa reformas sustantivas en la selección del alto, mediano y bajo escalón público, en la conducción política, en la descentralización, etc.
Por otra parte, es cierto también que la Presidenta mantiene un nivel de adhesión que tiene relación con el modo como ha ejercitado su liderazgo pero esta empatía no es traspasable ni a su equipo de trabajo más cercano, ni muchos menos a los funcionarios mas lejanos en distancia y en mando.
Durante las vacaciones, una amiga feminista histórica me comentaba a modo de corolario que ella pensaba que el gobierno y sobretodo Michelle BACHELET nunca como otro presidente de la República, había tenido los ojos – literal- de los medios de comunicación encima, y sobretodo de los hombres, en su mayoría de derecha, aunque en esto bastante “machistas”, para oponerse a su gestión gobierno y empoderamiento. Nunca como antes los medios de comunicación ventilaron cada detalle de la vida de alguien, de su familia, de sus relaciones, para encontrar algún detalle que expusiera una cierta vulnerabilidad “humana” al fin y al cabo. Cuando no son sus relaciones afectivas pasadas, es porque no la muestra, o no la ostenta en el presente, cuando no fueron detalles de su vestimenta o atuendo, son los kilos demás o de menos, cuando no son sus hijas o hijos, son sus vacaciones y los amigos y amigas en vacaciones y/o en descanso. Es cierto mi amiga trataba de calmar mi propia desmotivación y su argumentación es “absolutamente” verdadera. Valga la cacofonía y la redundancia porque nada es absolutamente verdadero, excepto la vacuidad y la inexistencia del yo.
Pero sigamos, otra amiga cientista política acrecentaba a lo anterior más que aplausos por la decisión en relación a la distribución de la píldora del día después. Y si. Ha sido un avance para mujeres adolescentes jóvenes. Para que hablar del programa de la educación pre escolar, en la que están embarcadas muchas educadoras de párvulos y escuelas a nivel de las regiones.
En efecto, la presidenta enfrenta un año de gobierno con moderadas realizaciones que tienen bastante apoyo en las mujeres, pero poco apoyo en los hombres que desde un criterio más generalista tal vez buscan ver “visibilidades” y no pequeños pasos. Es cierto además que ha tenido que bajarse de un diseño político de empoderamiento tradicional presidencialista como lo fue en la época anterior con los ex presidentes, y mantenerse en su perfil cercano a la gente entregando confianza, y por sobretodo capital social. Eso ha sido tal vez lo más notable.
Pero la cuestión de fondo es que este año, es decir el 2.007 ya no podrá dejar de tomar en cuenta los grandes temas, universalistas, como son: previsión, probidad, lobby, educación (Loce), medio ambiente, seguridad pública, descentralización por dar algunos ejemplos. Por lo tanto, es tal vez este año donde se jugará con mayor fuerza “la diferencia”. Después, puede ser demasiado tarde no para ella, pero si para la coalición que le da sustento a su gobierno.









martes, febrero 20, 2007

Volver al Mundo de estos Fenómenos


De regreso a los padrones habituales de inserción del Yo en la ciudad y en las relaciones sociales, observando los medios de comunicación de masas pareciera que la cuestión del calentamiento global con los consecuentes efectos medio ambientales y el informe entregado a la ONU es lo más impactante. Chile y su alrededor comienza con los recortes de suministro de gas desde Argentina y la necesidad del gobierno de acoger las necesidades de las industrias que se han visto afectadas en su producción principalmente por la protección laboral de los empleados. Y no faltaba más, por cierto que aparece el infaltable desate de toda la parrilla farandulera del festival, ya instalada, con su propaganda vociferante que cada vez tiene menos de carnaval y más de lata. ¡Que aburrido!
En llegando a la capital todo parece mezclarse a problemas de tráfico. Cuesta modernizarse dice el huaso tratando de embarcarse en esta suerte de programa de estaciones y paraderos planificados y acomodados con tickets, tarjetas y de un cuanto hay. ¡Divertido!
Las regiones muy bien gracias. Salen a la luz durante las vacaciones porque ahí los santiaguinos necesitan recargar pilas por esos lugares casi perdidos de la Internet, del celular, de los radares. Mientras, un bostezo somnoliento de marzo prepara los ánimos para la continuidad de más de lo mismo. Inicio del año escolar, celebración de un año del mandatario de turno, del día internacional de la mujer, la preparación para las fotografías, el corte de cintas de inauguraciones, el cocktail y la chamuchina que nos acompaña como el pan de cada día.
Y en política, lo mejor es sin duda el confuso, ambiguo panorama de la concertación y de la alianza por Chile ya que ambos conglomerados no consiguen motivar las adhesiones y participación de la ciudadanía. Cada una enfrenta de distinta manera su fragmentación, la desafección de la gente, la tanática pulsión de ir por la pendiente cuesta abajo con orgullo, pero sin abrir mano de la generosidad para el bienestar de la democracia nacional y regional. Los grupos que manejan el campo de la política cruzados por sus intereses económicos y de ejercicio del poder no alcanzan a respirar más allá de la aspiración a su reproducción que sola suelta agotamiento y a estas alturas contaminación más neurosis. ¡Quién lo diría hiper consumismo! Junto a la infaltable violencia en la calle, en los estadios, en las casas entre medio de asaltos, robos a mano armada y muerte de colocolinos acá, chiítas allá.
Mientras por suerte algunos de vacaciones pueden liberarse de los padrones habituales, aprender a observarlos para no creerse tanto el cuento de la importancia personal, de la circulación de capitales y todo lo demás que la elite bien sabe. O al menos para saber como entrar, de otro modo, al trabajo, a la “civilización” en el año del cerdo.

Eso es todo, a lo lejos alguien canta… a lo lejos.

viernes, febrero 02, 2007

Rayando la Cancha III


Sobre la propuesta de probidad de la Alianza habría que decir que: terminar con los operadores políticos es un discurso. El asunto es ¿Cómo? y en el ámbito de la práctica y de su aplicabilidad en Chile es de una imposibilidad casi absoluta. En su sentido estricto los senadores, los diputados, los ministros, el gobierno, los partidos políticos trabajan con operadores políticos. Y de un modo general son servidores públicos dado que su definición de planta y su encuadre quedo delimitada desde el gobierno de Augusto Pinochet. El punto es que su selección para trabajar en los aparatos y diferentes órganos públicos aunque suba el nivel de exigencia curricular no les da garantía ni les otorga credibilidad moral y ética. Por otra parte, el asunto es que si lo indica un parlamentario o un alcalde para ser privilegiado de entre una terna o en una quina tampoco signifique un respaldo político de un partido o de una orgánica partidaria.
En este aspecto debería hacerse un llamado a los colegios profesionales, a las asociaciones de técnicos para que hagan sus propuestas al país en el sentido de reforzar sus organizaciones en materia de fiscalización en materia de revisión de títulos y membresía.
En relación con las otras propuestas, lo que es definitivo es que si la Alianza no se abre a legislar sobre la inscripción automática no solamente está demostrando una falta de confianza en los jóvenes en general. Lo cual por cierto sería fome. Pero sería además incomodo porque se estaría con ello dificultando la participación democrática lo cual la enmarcaría nuevamente en su rasgo conservador y autoritario. No le haría bien si en efecto quiere ser alternativa real de gobierno al 2.010.
Desde su contraparte política, es cierto que la reforma al sistema binominal y el término del uso posidetis con efecto retroactivo tampoco tiene quórum en la Concertación porque varios senadores y diputados no podrían volver a re elegirse a partir del 2.010. Y por cierto que la regulación del lobby y de la intervención del capital, de los empresarios en la política pondría más de un control democrático al interior de los partidos políticos y de sus dirigentes, sean estos mandatados por sufragio popular o, servidores públicos y elegidos por el gobierno de turno por confianza y a discrecionalidad de la Presidenta o del Presidente, para limitar el tamaño de sus fechorías.
En resumen, no se puede dejar y de hecho no se puede aceptar la autonomía de examen “en y a conciencia” de cada quién, por lo tanto sin regulación y sin aceptar que ella existe aunque sea implícita en la opinión pública. No se puede aceptar el traspaso de los líderes y servidores públicos al mundo empresarial y de los negocios del capital. Y viceversa. Esto es como dejar a la reflexión de la propia conciencia moral y ética el ejercicio casuístico que esconde el interés instrumental financiero. Es como la mano invisible del mercado pero operando esta vez desde la conciencia, como si no existiese a modo de contraparte la sociedad moral para espejear al individuo, sociedad civil y educación cívica, lenguaje, lenguajiar y conversación social sobre el punto. Y evidentemente de parte del individuo, es no querer reconocer que los otros están mostrando algo indebido, impropio.
En efecto, esto conllevará a definir si un parlamentario elegido por sufragio popular y militante de un partido es también un funcionario o servidor público, si un funcionario de alto gobierno tiene que cumplir un tiempo antes de cruzar el puente, o con cuanto tiempo de antelación un candidato empresario debe hacer el fidei comiso ciego, o en que momento de la carrera política los mismos deberían hacer declaración de patrimonio, etc.
A lo anterior deberían agregarse medidas sobre el uso del tiempo de los funcionarios públicos en actos de campaña y en tiempos electorales, así como la suspensión de entrega de obras de parte del gobierno de turno. Ahora esta última cuestión es conversable y debatible porque la derecha económica que participa en la campañas electorales de la derecha política debe también jugar a la transparencia y a la probidad. En este sentido, deberían también regular su forma de participación ya que no pueden abstenerse de participar. Y aquí es necesario que comprendan que es muy difícil solicitarle a un gobierno y a su equipo que no trabaje para una re elección política electoral si la pugna es precisamente con una derecha política que esconde intereses de grupos económicos, verdaderas oligarquías aristocratizantes y plutocráticas, castas regionales enquistadas por familias y linajes, generación tras generación.
Basta recordar que la inequidad en la distribución de la riqueza en Chile no es una historia y por cierto opera a favor del 5% de la población. Esto es una realidad que la democracia no ha tocado. Y la Concertación tampoco. Se podría hasta decir, que la elite política concertacionista ha tenido acceso a la mesa del pellejo de ese 5%. Y eso se ha logrado con el voto. Un voto que puede llegar cansado y anciano al 2.010.
Por todo lo anterior, para hacer ley se espera nuevamente altura de miras de ambas coaliciones políticas.